Hasta siempre MAESTRO

   

                                           HASTA SIEMPRE MAESTRO

Al caer la noche de ese fatídico día 17 de junio nos llegó la peor noticia que un taurino puede recibir, una pesadilla de la que queríamos despertar pero por más que lo intentábamos era imposible, esa noticia era real, no lo podíanos asimilar, había fallecido uno de los nuestros, un torero de los pies a la cabeza y un hombre como la copa de un pino, siempre cercano, siempre pendiente, nadie había trabajado tanto como él en este duro mundo para llegar al lugar que ocupaba, Iván era perfectamente conocido por cualquier aficionado que tuviera cierta idea de lo que es este bello arte llamado tauromaquia, nos había emocionado en numerosas tardes, triunfador en numerosas ferias y en cada una de las plazas que Iván Fandiño visitaba, logró abrir la puerta grande en Madrid la mejor plaza del mundo, logró el sueño "de Madrid al cielo" con aquella estocada que nunca olvidadarán mis ojos, pero el pasado sábado abrió la puerta grande más importante que existe, abrió la puerta grande del cielo en la que entró a hombros de todos nosotros, todos y digo todos y cada uno de nosotros, ganaderos, toreros, empresarios, aficionados... te alzaremos a donde te mereces, a lo más alto en que uno torero puede estar, a la gloria eterna.

Dicho esto que me sale de lo más profundo del corazón aunque no expresa ni una mínima parte de lo que pasó por mi cuerpo al leer tal terrible noticia cabe decir que Iván Fandiño falleció a los 36 años en la plaza de toros de Aire Sur L'Adour mientras realizaba un quite al toro de Juan del Álamo.

Nos ha dejado un grande que se ha ido haciendo más grande si cabe este mundo, cada día que pasa me siento más orgulloso de ser taurino y es gracias a hombres como tú Iván, te juro que nunca te olvidaré, eras de mis favoritos, tenía y por supuesto sigo teniendo tu foto colgada en mi pared, pero ahora la tengo aún más orgulloso, no merece menos un héroe como tú maestro.

Ahora estás en el cielo seguro que Victor Barrio te recibió con un fuerte abrazo que ambos merecéis, seguro que le diste un beso a Adrián sin duda otro de los nuestros, ojalá estéis los tres juntos hablando de toros y riendo mientras observais el legado tan grande que habéis dejado.

Esta es mi humilde opinión, la de un chaval de 19 años defensor y aficionado de la tauromaquia gracias a "superhombres" como IVÁN FANDIÑO, nunca te olvidaré torero... 

                                                                              Diego Merchante